Ciudad de México al 31 de julio de 2019
Debido a la fragilidad económica que presenta el país, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) anunció que se orientarán recursos por 485 mil millones de pesos (mmdp) para
- la creación de infraestructura,
- impulsar la inversión física y el consumo privado, y
- adelantar los procesos de licitación del gobierno federal del 2020.
Con esto, el gobierno espera poder dinamizar a la economía mexicana que está teniendo un desempeño bastante pobre.
Montos asignados por rubro
Fuente: Elaoración propia con información de SHCP
¿En qué consiste el plan?
Fuente: Elaoración propia con información de SHCP
¿Qué esperamos?
- Si bien estos apoyos van en la dirección correcta, pensamos que sus efectos en la economía real se verán reflejados hasta el cierre del 2019 o bien, hasta el próximo año; y eso considerando que el gobierno logre generar certidumbre en el sector empresarial (debido a la amplia participación que se espera de la IP), ya que gran parte de la debilidad económica actual se debe a la caída de la inversión privada.
- No esperamos ver un impacto negativo sobre las finanzas públicas, porque lo que se está destinando en estas medidas (que no todo saldrá de los bolsillos del gobierno) ya estaba contemplado en el Presupuesto del 2019. En lo que va del año, se han emprendido serias medidas de austeridad que han llevado al gobierno a gastar menos de lo previsto. De enero a mayo se han gastado 140 mmdp menos de lo programado y, de inversión física pública se han destinado 225 mmdp, 16.4% menos a lo ejercido en el mismo periodo del 2018. Por lo que si comparamos estas cifras con el monto anunciado de 485 mmdp por la SHCP, podemos concluir que estas medidas sí podrían tener efecto positivo sobre la economía.
- Más allá de que exista disponibilidad de fondos del gobierno, lo crucial será ver la demanda de crédito por parte de las Pymes y del consumidor. Este año preveíamos que los programas sociales ayudarían a impulsar el consumo privado, pero hasta el día de hoy, muchos de estos se han retrasado y otros más no hemos visto que se traduzcan sobre un mayor gasto personal.
Conclusión
La economía mexicana atraviesa serios problemas en un entorno de mayores riesgos externos e internos, lo que ha originado una desaceleración mayor a la esperada. En el primer trimestre del año, la economía se contrajo 0.2% en comparación con el 4T18 y, acorde con las cifras oportunas del INEGI, en el segundo trimestre el país avanzó 0.1% trimestral. Con esto, la economía se libró de caer en una recesión técnica1, pero sufrió un estancamiento al promediar un crecimiento del 0.0% en el primer semestre del año, lo que nos lleva a pensar que aún considerando los apoyos anunciados por el gobierno, éstos no evitarán que el PIB sea menor a 1.0% este año (nuestro estimado es de 0.8%), el más bajo desde la crisis financiera del 2008.
Consideramos que las medidas anunciadas por la SHCP son positivas, pero es indispensable que el gobierno implemente políticas anticíclicas adicionales para promover el crecimiento de la economía y evitar, efectivamente, que sí caigamos en recesión; por ejemplo, retomar los farmouts y las subastas petroleras, evitar mayores reducciones del gasto público (y especialmente de la inversión pública), dejar de destinar gran cantidad de recursos públicos a Pemex, promover la participación de la inversión privada a través de proyectos y de mayor certidumbre, etc.
Publicado por.
Daniel ZagaDirector de D.Econosignal
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Alessandra OrtizEconomista Sr.
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